Cómo trucarse: Guía para las mujeres trans, las personas trans femeninas y las personas a las que se asignó sexo masculino al nacer

Por “trucarse” se entienden varios métodos para hacer que la zona inguinal parezca más plana o lisa. Esto puede hacerse como práctica de afirmación de género para ayudar a las mujeres trans o a las personas identificadas como femeninas a sentirse más cómodas con su expresión de género, pero el trucarse no es exclusivo de las personas trans y es habitual entre cosplayers, artistas drag y otres artistas como parte de sus formas artísticas. Trucarse no es un requisito para afirmar el propio género, pero es una técnica que utilizan a menudo las mujeres trans, las personas trans femeninas y las personas a las que se asignó sexo masculino al nacer para sentirse mejor con su presentación de género.

Existen tres métodos habituales para trucarse: cinta adhesiva, ropa interior trucadora y ropa interior de compresión. Cada uno de estos métodos tiene sus pros y sus contras.

  1. Método 1: Cinta trucadora o cinta gaffer
    • La cinta trucadora o cinta gaffer es una cinta especial para uso corporal. Se cortan de 1 a 3 tiras de cinta para una cobertura total, dependiendo de la anchura de la cinta. La longitud se determina midiendo desde la parte superior de la ingle, pasando por las piernas, hasta la parte superior de las nalgas.
    • La cinta gaffer se utiliza habitualmente para trajes de baño, actuaciones o cualquier ocasión en la que la persona que la lleva desee un ajuste más seguro y sin costuras.
    • La cinta gaffer es de un solo uso: basta con desecharla.
  2. Método 2: Ropa interior trucadora (o simplemente “trucadoras”)
    • Las trucadoras son un tipo de ropa interior que alisa y aplana el aspecto de la ingle. Esta opción es la mejor para las actividades diarias y las salidas, ya que son más flexibles y permiten un movimiento más libre. Lo mejor de todo es que las trucadoras son reutilizables y lavables.
  3. Método 3: Ropa interior de compresión
    • La ropa interior de compresión es una buena opción para las personas que no desean utilizar cinta adhesiva y quieren más opciones de compresión que las que ofrece la ropa interior trucadora.
    • La ropa interior elástica superpuesta es otra opción para un trucado ceñido pero no demasiado apretado. La ropa interior sintética puede provocar irritaciones, por lo que es preferible utilizar algodón.

Consejos de comodidad y seguridad al trucarse

El riesgo más común de trucarse es la irritación de la piel. Los efectos secundarios graves son poco frecuentes y pueden prevenirse tomando las precauciones adecuadas.

Algunas personas consideran que recortar o afeitar la zona de la ingle puede facilitar el remetido; ayuda a evitar la irritación de la piel e impide que la cinta tire del vello. Utiliza crema de afeitar y una cuchilla afilada y limpia, y evita afeitarte justo antes de trucarte para evitar irritaciones.

La cinta trucadora es el método más seguro para trucarte; sin embargo, es mejor utilizarla sólo durante un breve periodo de tiempo, ya que no puedes ir al baño. Evita utilizar cinta aislante, ya que puede desgarrarte el vello y la piel y provocar erupciones o irritaciones. No se recomienda el uso de cinta adhesiva médica, ya que no se adhiere cuando está mojada. Ten en cuenta que el uso de cinta adhesiva puede dificultar o causar dolor al sentarte.

Como no puedes orinar mientras te trucas, ve primero al baño. Si vas a estar trucando durante varias horas, planifica descansos que te dejen tiempo suficiente para ir al baño y volver a trucarte con seguridad. Si evitas ir al baño durante largos periodos de tiempo, corres el riesgo de desarrollar infecciones urinarias y posibles daños renales.

¡Mantén la hidratación! Algunas personas evitan beber agua para no tener que ir al baño, pero pasar mucho tiempo sin beber agua empeora las molestias corporales. Los altos niveles de actividad y los ambientes cálidos pueden ser peligrosos si evitas el agua. Ciertos tipos de terapia hormonal son diuréticos y ya suponen un riesgo de deshidratación, por lo que evitar el agua durante el trucado puede ser realmente perjudicial.

Trucarse puede ser un poco incómodo, pero nunca debe ser doloroso. Si sientes dolor, tómate tiempo para reajustarte. Mantenlo en 8 horas o menos, e intenta no trucarte diario para dar un respiro a tu cuerpo. Escucha a tu cuerpo: si sientes dolor, molestias prolongadas u otros problemas, aunque estés tomando medidas para trucarte con seguridad, habla con un proveedor de salud en quien confíes.

Cuidados posteriores

Los cuidados posteriores son muy importantes para garantizar tu salud personal y la higiene de tus prendas trucadoras. Asegúrate de lavar tus prendas trucadoras después de cada uso para garantizar la higiene. El uso de prendas trucadoras usadas puede provocar infecciones urinarias y otros problemas higiénicos si no se lavan adecuadamente.

Utiliza removedor de adhesivo o alcohol isopropílico para retirar de forma segura la cinta, para evitar causar irritaciones o daños al retirar la cinta. Ducharte con agua tibia o caliente ayudará a ablandar el adhesivo y facilitará la retirada de la cinta.

Información adicional (en inglés)

Otras guías para trucarse
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